Samuel García lo volvió a hacer y es que esta vez, el Senador por Movimiento Ciudadano con licencia se volvió tendencia por el fragmento de una entrevista en el que relató “lo duro” que era cobrar en sus primeros trabajos porque lo hacían jugar golf los sábados y además, debía “resistir” los 18 hoyos.
Así es, parece ser que Diosito le da sus peores batallas a sus mejores guerreros y aunque esta vez la polémica no la armó la esposa del senador Samuel García Sepúlveda, Mariana Rodríguez sí lo hizo él con su polémica confesión.
Samuel García relata su “dura vida” trabajando en el golf
En el fragmento de la entrevista que le hicieron a Samuel García, el senador explica que en una de sus primeras chambas le tocaba hacer prácticamente de todo, pero no cosas como las que te tocaron a ti y a mí (traer el cafecito del jefe o lavar el baño), sino aguantar partidos de golf hasta el último hoyo.
“Era bien duro porque me decía: ‘si quieres que te pague la semana te tienes que ir conmigo al golf el sábado y terminando los 18 hoyos, te pago la semana’. Pero ¡era bien duro!”.
Adelante con las imágenes:
Obviamente, tras la difusión de estas imágenes, Samuel García se convirtió en la comilona del internet que no se lo acabó en críticas porque… ¿Cómo vamos a creer que es bien duro ir a jugar golf en el trabajo?
De inmediato, alguien se acordó del ojo Remi pensando en lo que este hombre tuvo que sufrir:
Y otros, rescataron la cara de Samuel García como el rostro de alguien que no cobra una semana en su trabajo:
Y hasta con un meme de clásico de Lolita Cortés pidieron ya no votar por él:
Esta no es la primera vez que Samuel García hace polémica pues recordemos que en una ocasión, increpó a su esposa por mostrar su pierna en un live de Instagram, y en otra ocasión, confundió un albergue para niños con cáncer con un refugio para perros.
Pero si pensaban que su esposa se salvaba, tampoco pues en una ocasión, aseguró que su vida era difícil y lo que le sigue porque perdió una chancla, o se dañó su iPhone.
En fin… Parece que no a todos nos toca jugar golf para que nos paguen nuestros salarios, pero a ellos sí, y además, tienen muchas otras peripecias.
Fuente: Twitter.