Una mamá oso y sus dos ositos entraron a una pizzería para cenar

Una noche en el paraíso

Tony Francher se dirigió como todos los días a la pizzería Antonio’s Real New York Pizza en Estes Park en Colorado. Al llegar al lugar vio que una de las ventanas del local estaba rota y las bandejas de las pizzas estaban dobladas. Al ver las cintas de vigilancia se sorprendió al ver que los intrusos eran… ¡una mamá oso y sus crías!

Así como los humanos tenemos antojos nocturnos y nos levantamos en la noche para tomar algo del refrigerador, el estómago de los osos y su olfato los llevó al interior de una pizzería. ¿Existe algo más delicioso que una pizza? No los culpamos.

Estos osos se dieron un festín de su vida el sábado por la noche. Primero rompieron la ventana de la pared que daba al auto servicio para las órdenes en automóvil.

De ahí empezaron a buscar en los gabinetes de la cocina algo para comer y empezaron con las masas. No les fue fácil, tuvieron que batallar con ellas antes de darles un mordisco.

Después encontraron lo que habían olido desde afuera… ¡¡el salami!!

Una vez que quedaron satisfechos se marcharon del local, claro, dejando rastros de salami y masa a su salida. No comieron más ya que todos los otros ingredientes estaban en un cuarto al cual no tuvieron acceso.

Antonio DeSousa, el otro propietario de la pizerría, compartió el video en Facebook. En vez de enojarse pidió a las autoridades que no les hicieran daño a los osos.

Una nota para la policía de cara al futuro: si un oso entra en nuestras tiendas, no le disparen. Sería mucho mejor si dejáramos los contenedores de basura en su anterior lugar, así los osos no se volverían tan desesperados como para entrar en nuestras casas o negocios. Los daños en dólares serían mucho menores.

Una posible explicación a esta expedición nocturna es que el invierno se acerca y los osos necesitan comer alimentos altos en calorías para poder hibernar. Al tener un olfato 2,100 veces mejor que el de nosotros, seguramente detectaron el olor a comida.

Los basureros en la comunidad cercada a las Montañas Rocosas, lugar donde está la pizzería, fueron modificados para evitar que los osos que bajan de las montañas no se acerquen a buscar comida entre los desechos… pero eso está provocando que ahora entren a las casas y los negocios porque tienen hambre.

Tras la visita de los osos, los empleados se pusieron a limpiar, sanitizar y poner todo en su lugar para poder abrir en la tarde del domingo para los humanos deseosos de probar esas pizzas que causaron incluso antojo en estos animalitos peludos.

Vía 9News