Sandra Echeverría está viviendo el sueño ahora que es la nueva protagonista de La Usurpadora. Sin embargo, no todo puede salir bien o estar controlado, como vimos en la entrevista que tuvo en el programa Hoy, en la que su pequeño hijo se metió para interrumpir todo.
Todo marchaba viento en popa y Sandra Estaba demostrando por qué va que vuela para ser la actriz de este año, pero de repente su hijo, Andrés, vio el momento perfecto para que dejaran de ignorarlo en sus cosas de adultos.
Mauricio Mancera, quien estaba haciendo la entrevista, trató de arreglar todo y le aseguró que los chamacos siempre dan rating, pero parecía que cualquier cosa era motivo para el descontrol de Andresito. Vean nada más:
Como pudiste ver, no solo interrumpió la entrevista, sino que además se subió a la mesa y estaba listo para hacer de las suyas en el momento que pudiera, pero Sandra se motivó y puso mano dura, para que dejara de hacer destrozos.
Primero, le dio una simple advertencia, pero eso no funcionó, porque el vendaval que vive dentro de su chamaco despertó y atacó como la mala suerte al Cruz Azul. Sin embargo, para solucionar todo lo tomó y lo sentó en sus piernas.
No podemos evitar notar que la carita de Sandra pasó de feliz y controlada a incómoda y sin dominio de la situación, pero todo se resolvió porque uno no se puede enojar con esa carita de pillo de Andrés, que lo único que quería era un poco de atención de su mamita.
Como sea, vemos que Sandra Echeverría es una gran madre y sabe dónde poner los límites, aunque eso no le impide darle amor, cariño y comprensión a su bebito, que se ve que no se puede estar quieto ni cinco segundos, como casi todos los niños.
Esperemos que esa mano dura la veamos también en La Usurpadora, que ya empezó y trae la intriga a todo lo que da.