En Washington existe un establecimiento dedicado a la venta de café que está cosechado un gran éxito. Se trata del Bikini Beans Espresso y la peculiaridad de esta cafetería es que las camareras que atienden lo hacen en bikini o ropa interior.
La atractiva cafetería es propiedad del empresario Carlie Jo y es un verdadero éxito, pues ha conseguido la calificación de cinco estrellas en el blog Yelp y ya ha abierto algunas sucursales en en el estado de Arizona.
Por supuesto, esta cafetería se ha vuelto todo un fenómeno en la redes sociales y la páginas oficiales de Bikini Beans Espresso cuentan ya con miles de fervientes seguidores.
Sin embargo, y como sucede en estos casos, a esas legiones de fans se unen los que critican el concepto por considerar humillante que mujeres atiendan en ropa interior, ya que según estas voces, se atenta contra la igualdad de género.
Pero los propietarios se defienden de estas críticas argumentando que el objetivo es dar poder a las mujeres.
“Queremos empoderar a las mujeres para que se sientan bien con ellas mismas”, señaló el establecimiento a través de su página web.
Las mujeres de todo el mundo tienen derecho a votar, a ser homosexuales, ser líderes comunitarias exitosas y hasta postularse para presidente.
Mike Fagan, alcalde de una localidad de Arizona donde también abrió sus puertas el Bikini Beans Espresso, intentó imponer algunas restricciones porque, en su opinión, el establecimiento promovía una política de explotación de las mujeres.
Además, algunos habitantes del municipio tampoco comparten afición a semejante modo de “marketing”.
