Los perritos bebé son, sin duda alguna, los mejores amigos de los seres humanos. Están con nosotros en las buenas, en las malas y en las peores, y su cariño puede llegar tan lejos que incluso nos llevan en su inconsciente.
Esto lo comprobó la psicóloga de animales -sí, existen- Penny Patterson, quien luego de una serie de estudios e investigaciones descubrió que los perros pueden soñar con las personas que quieren.
Un factor de preferencia en los perros, se basa en elegir a aquellos seres humanos que los han tratado bien, protegido, y dado de comer para que los lomitos, como también se le conoce a esta especie, puedan tener buenos sueños junto a quienes identifican como líderes de su manada.
Por este motivo, cuando están dormidos es común que muevan sus patas, brinquen, hagan ruidos extraños y hasta ladren o muevan la cola.
Ellos, al igual que nosotros, atraviesan distintas fases del sueño, por lo que al llegar a la más profunda dan rienda suelta a su imaginación y su cerebro reproduce una serie de imágenes donde se registraron momentos placenteros como dar un paseo, jugar o sentir cariño.
Y aunque pareciera increíble, este comportamiento no es único en los perros ni en los seres humanos, sino que se trata de una conducta compartida entre algunos mamíferos.
https://www.youtube.com/watch?v=wI8XgJ3JebE
Lo malo es que también ellos pueden ser víctimas de pesadillas y malos sueños, en los que por lo general, se reproducen momentos que pudieron generarles angustia como un regaño, un susto o situaciones de maltrato 🙁
Según Penny Patterson:
“Del mismo modo que las personas, es común que los perritos tengan pesadillas cuando se sienten ansiosos o inseguros, o cuando experimentaron una experiencia similar despiertos”.
Por otra parte, Deirdre Barrett, psicóloga clínica y evolutiva de la Universidad de Harvard dijo que los estudios de Patterson son ciertos, añadiendo que los lomitos, en algunos casos, también pueden recrear sensaciones y olores mientras descansan.
Si tu perrito se muestra inquieto mientras duerme, puedes observar su comportamiento y acercarte a él para tranquilizarlo, pero no debes olvidar que siempre es importante darle seguimiento a su salud con un buen veterinario.