María Félix tiene poco más de 18 años de fallecida y aún da mucho de qué hablar, sobretodo cuando recordamos sus mejores momentos como cuando arremetió contra el subcomandante Marcos.
Corría el año 2001 cuando la Doña decidió explotar contra el líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) debido a que en ese momento, hizo un par de comentarios contra el presidente en turno, Vicente Fox Quesada, y eso no le pareció a la doña.
El pleito se puso interesante cuando la misma María Félix fue a inaugurar la I Feria Internacional de Arte y Antigüedades donde se exhibían algunas de sus joyas más valiosas en el Palacio de Bellas Artes.
Fue cuando una reportera de TV Azteca se le acercó a cuestionarla sobre su salud, que la actriz aprovechó ese momento para aclarar que se encontraba bien de salud a pesar de que mucha gente se inventaba que estaba mal. Pero de paso, se enojó.
María Félix arremetió contra el subcomandante Marcos
La Doña, que de por sí venía enojada e intentando conservar la compostura, cambió de semblante para expresar algo que sí la disgustaba sobre Vicente Fox y cómo estaba “poniéndose de rodillas” ante el subcomandante a quien calificó como un “naco arrogante”.
“Lo único que estoy de muy mal humor porque nuestro presidente se está poniendo de rodillas frente a un naco, arrogante, payaso y horrible, gracias”.
Frente a reporteros del periódico La Nación, La Doña mantuvo la misma actitud y a ellos les reveló que si bien había votado por Vicente Fox, no le parecía el comportamiento que estaba teniendo frente a Rafael Sebastián Guillén Vicente, el subcomandante Marcos.
“Sí voté por el presidente Fox, pero si hubiera sabido cómo se está comportando no hubiera votado por él (…). De rodillas delante de un payaso, que si se quita sus arreos y sus cosas no es más que un naco (…). Lo único que le falta es llorar. (…) No es posible que los mexicanos estemos de rodillas ante un naco como ese”.
Ahí mismo, la doña le pidió a la Virgen de Guadalupe para que Marcos regresara a Chiapas, pues en ese momento él junto con el EZLN, avanzaban por la Ciudad de México.
Eso sí, nadie se esperaría que la Doña falleciera poco después de este polémico momento, el 8 de abril de 2002 a los 88 años de edad, pero sin duda su frase nos quedó para la posteridad.
