El México antiguo estaba lleno de criaturas y seres legendarios que habitaban desde lo profundo de las aguas hasta en lo más alto de las montañas. Aquí te contamos de 10 criaturas que estaban y aún están en el imaginario popular:
Youaltepuztli
Era en la espesura de los bosques que rodeaban a la gran Tenochtitlán en donde rondaba un hombre sin cabeza haciendo sonidos como si alguien estuviera talando un árbol. Se trataban de sus costillas que abrian y cerraban. Los más valientes debían intentar cazarlo. Cuando lo encontrabas, debías pedirle una de las espinas de maguey que guardaba en el interior de sus costillas. El Yoaltepuztli sólo te dejaría tomar una pero si eras valiente tomabas cuatro. Cada una representaba un cautivo que lograrías tomar en la guerra y con cuatro cautivos, un simple macehual podría subir de categoría.
Otra manera de obtener su favor era arrancando su corazón y correr con él para envolverlo y guardarlo. Si al otro día aparecúan plumas o algodón, entonces habría fortuna, pero su había un manto raído y sucio se acercaba la desgracia.
Ahuizotl
Una criatura con forma de perro, manos de mono y una larga cola que terminaba en una mano habitaba las profundidades del lago en el que estaba instalada Tenochtitlán. Ese inmenso lago, de cuando en cuando, tenía remolinos de agua que eran provocados por la cola de este animal. Ahuizotl era el responsable de que se ahogara la gente pues los jalaba con su cola. Como era relacionado a los dioses del agua y la lluvia, las víctimas sólo podían ser tocadas por los sacerdotes una vez rescatado el cuerpo.
Aluxes y Chaneques
Chanque en nahuatl significa “habitante” (literalmente, “el que posee el hogar”). Cada región de la naturaleza tenía su habitante misma que es procurada por ellos. Lagunas, bisques, cerros, prados, valles, lagos, ríos, todos tenían su Chanque y si alguien faltaba al respeto, era muy probable que el chaneque terminara por causarle un mal de ojo, un espanto o un susto (y le robaran su tonalli, la energía que recibimos al nacer y que nos da el raciocinio).
Los aluxes son la versión maya de los chaneques (habitan en las grutas y cenotes) y también gastan bromas y hacen travesuras a los humanos. Pueden ser engatusados con ofrendas para que vayan a un lugar en específico.
Los aluxes y chaneques también eran invocados para proteger las cosechas.
Nahuales
Hay varias referencias para la palabra “nahual”. La primera es aquel animal con el que tenemos un nexo especial cuando nacemos. La otra son los hechiceros que tenían la capacidad de cambiar su forma física y convertirse en algún animal e, incluso, en un fenómeno natural (como la lluvia, los rayos y las centellas). Algunos son malos y otros protegen a su comunidad y el equilibrio entre el mundo humano y el mundo natural y sagrado.
Cuatezcatl
Una pequeña ave (del tamaño de una garza) que tenía un espejo en la cabeza. Andaban en las lagunas de Anáhuac. Cuando se zambullían en el agua tomaban la forma de brasas resplandecientes que iluminaban las profundidades. Si uno se reflejaba en su cabeza podía ver su porvenir.
