Este 3 de noviembre se informó que Miguel Bosé ganó el juicio contra Ignacio Palau para que sus cuatro hijos puedan ser criados como familia. El cantante español no piensa reconocer a dos de los niños que biológicamente no son suyos, aunque su ex no se rendirá tan fácil.
Tanto el intérprete como su expareja se presentaron en los juzgados de Madrid para conocer la resolución del magistrado. Miguel Bosé ganó el juicio y en la sentencia se negó la petición de Ignacio Palau para la obtener la filiación de sus cuatro hijos.
La intención del escultor español siempre ha sido que los cuatro niños sean criados en familia. Después de vivir en pareja por más de 25 años, Nacho Palau solicitó que los menores fueran considerados como hermanos, ya que crecieron con filiación afectiva pese a no compartir los genes.
El ex de Miguel Bosé aseguró que no busca ningún tipo de beneficio económico y solo quiere que los cuatro menores crezcan juntos. Palau tiene claro que seguirá adelante con su petición y agradeció a todas las personas que lo apoyaron durante el proceso.
El artista plástico, quien vive en la localidad de Chelva en Valencia indicó en un comunicado que sigue confiando para que se haga justicia. Nacho Palau considera llevar el caso hasta las últimas instancias, pues no le parece justo que dos de sus hijos no vivan en las mismas condiciones.
Diego y Tadeo de nueve años son los hijos biológicos del cantante y viven con él en México, mientras que Ivo y Telmo se encuentran en España. Antes de la separación de sus padres, los menores recibían la misma educación, el mismo trato y se desenvolvían en los mismos círculos.
