Para muchos las montañas rusas son verdaderas máquinas de tortura a las que sus familiares y amigos los obligan a subirse por “diversión”.
Sin importar el país donde vivamos y el parque de atracciones que visitemos, hemos sido alguna de estas pobres personas al menos una vez en nuestras vidas.
Las cámaras fotográficas que suelen poner cerca de la parte más intensa del aterrador recorrido de estas máquinas de muerte han logrado capturar las reacciones de las pobres almas que se han subido a sus carritos.
Aquí algunas de las mejores fotos.
Ese niño conoció muy pronto en su vida la definición más pura de “terror”.
Y esta cámara capturó el instante preciso en que el pobre sujeto de la chamarra gris perdió las llaves de su auto.
Esa cara que pones cuando sabes que has cometido un error que marcará tu vida para siempre.
Esta señora definitivamente NO quería subirse a ninguna montaña rusa.
Cuando sabes que tu vida no volverá a ser la misma después de tu primer recorrido en una montaña rusa.
La cara de la que va detrás de la chica de la blusa azul lo dice ABSOLUTAMENTE TODO.
“Recuerda no sacar manos ni pies del carrito durante el recorrido” porque si no podría pasarte algo como esto.
Estas dos amigas se esforzaron en lucir completamente casuales durante el recorrido, pero el señor de atrás arruinó una foto que habría sido perfecta de no ser por él.
Ese niño ha visto cosas.
Esta mujer estuvo tan aterrada durante todo el recorrido que no vio que su novio había pedido su mano en matrimonio con ayuda de sus geniales amigos.
Foto de la izquierda: antes de saborear el terror puro. Foto de la derecha: durante un recorrido en espiral hacia el círculo más profundo del mismísimo averno.
¿Con cuál de todos estos te identificaste más?
