Una visita a un museo puede ser también la ocasión de encontrar a tu doble de otra época.
Mucha gente ve con recelo los museos. Es por completo un prejuicio el hecho de que sea aburrido asistir a uno. Las cosas que puedes encontrar en cada museo son tan variadas, que pueden ir desde los calzones de un héroe de la revolución, hasta tu doble, si es que tienes suerte. Contemplando esa posibilidad, ahora las visitas a los museos pueden ser más divertidas, si te enfocas en buscar a tu yo del pasado en las pinturas y las esculturas que llevan en conserva desde hace algunos siglos.
Esta gente ya tuvo esa suerte y puedes ver que en la historia de este mundo ha existido más gente parecida a ti de la que pensabas, por lo que no eres ni tan único ni tan original… y mucho menos el primero. Como sea, antes de agarrar el tren de la depresión y la melancolÃa, veamos todas estas muestras de que, como a Disney, a veces a la genética y a la naturaleza se acaba la imaginación como para mandar el mismo molde otra vez a la Tierra.
Un poco de peinado y ya está, pero el futuro es bueno para los que venden ligas y gel.
Cuando la moda de aerobics viene desde el renacimiento.
De la secta de los hijos de Odón.
Ninja americano tiene más sentido al ver esta foto.
Cuando a pesar de los siglos no entiendes qué es peinarse y arreglarse la barba, y tu pasado te mira con decepción.
Bueno, al menos todos los siglos le enseñaron a sonreir.
Tu primo el que se cree rockero, existÃa desde hace muuuucho tiempo en las paredes de un museo.
Cuando intentas retar a tu yo del pasado a un juego de no parpadear y pierdes.
¿A caso son algo de Mr. Bean?
Tras miles de años, este pobre niño pudo conseguir un corte de pelo y una camisa.
Ste men.
TÃo, no le quiera jugar al cosplay.
Bueno, David Gilmour sufrió mucho por esto como para que estés riéndote.
Su pasado está muy decepcionado de que sea fan del Arsenal.
Y sigue esperando…