Imagina que recorres una pasarela de cristal suspendida a más de mil 180 metros de altura y uno de sus paneles comienza a resquebrajarse cuando pasas encima. ¿Qué haces?
Justo eso fue lo que pasó el verano de 2015, cuando decenas de turistas se aterraron al ver que lo único que evitaba una caída de más de un kilómetro de altura sobre las rocas angulosas de un valle de la región de Hebei, al norte de China, amenazaba con romperse en mil pedazos.
A poco más de dos años de ese incidente, los responsables del parque nacional donde se encuentra esta atracción de infarto decidieron trollear a sus visitantes de la forma más horripilante que puedas imaginarte.
Para muchos bromear con el peligro de una horrorosa muerte no es asunto de risa, pero para los organizadores de esta “nueva atracción” es de lo más hilarante.
Afortunadamente (y por si no lo has notado) las fracturas son simuladas por medio de una proyección hecha con una pantalla de LCD adaptada a uno de los tantos paneles que conforman la pasarela que lleva a lo largo de las Montañas Taihang del este, en la ciudad de Handan.
Los paneles son muy seguros y se puede ver a través de ellos, pero eso no evita que la gente le pierda completamente el miedo a una caminata a tantos metros de altura.
La animación se activa cada vez que alguien pasa encima de uno de los paneles especiales, lo que vuelve más terrible la broma. Eso sí, quienes no sepan de que hay pantallas LCD que se activan con la presión de los pasos, pasarán un muy mal rato pensando que están a punto de morir.
¿Te atreverías a pasear entre las montañas de un valle chino?
