En Asia todo es posible, incluso que un niño de 10 años logré sobrevivir durante casi un mes comiendo serpientes.
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Se trata Miao, un niño chino que se escapó de su casa porque sus papás le pegaron, así que pasó 24 días vagando por campos y bosques.
El inteligente niño se puso como meta caminar a la ciudad de Chongqing, a unos 800 kilómetros de su casa y al llegar a dicha metrópoli buscar trabajo (y tú llorando porque te castigan los videojuegos).
El independiente niño recorrió muy pocos kilómetros, sin embargo, su capacidad de supervivencia sorprendió a todos.
Miao cazaba serpientes y las asaba, también se alimentaba con pescados que atrapaba en los ríos con una bolsa de plástico.
A la hora de dormir se quedaba en remolques de camiones, pajares o pilas de hojas.
Pero Miao no fue un Mowgli cualquiera, recolectaba cartones y botellas de plástico para venderlas y obtener algo de dinero.
Además durante su trayecto se encontró con un celular y lo vendió en casi cuatro dólares, con los que se compró comida, un cuaderno y una pluma para escribir sus aventuras.
Obviamente hubo gente que le ofreció comida o alojamiento gratis, sin embargo, Miao dijo que nunca aceptó la ayuda de extraños y que tampoco le robó a nadie.
Miao también sufrió de diarreas y fiebres durante su trayecto pero pudo curarse él mismo con un tónico hecho con agua y bayas silvestres que aprendió a preparar en el campo.
El 23 de julio se acabó la aventura, la policía lo encontró y llamaron a sus padres, quienes al verlo prometieron no pegarle, a cambio de que no vuelva a escapar.
Vía: Excelsior