Gatos que quisieron suplantar al Niño Dios en el nacimiento

Cuando llega el 12 de diciembre un gran número de mexicanos se hace parte de una de las tradiciones más bonitas de las fiestas de fin de año: la colocación del nacimiento.

Este pequeño diorama representa el nacimiento de Jesucristo en el pesebre que se convirtió en uno de los escenarios más reconocibles del mundo.

La gente pone bueyes, pastorcitos, ángeles, reyes magos e incluso patitos a pesar de que en esa región de Palestina no había muchos patos debido a la falta de cuerpos de agua que representaran un lugar para que proliferaran.

La tradición dicta que el nacimiento se pone el 12 de diciembre, Día de la Virgen María de Guadalupe y no es hasta las primeras horas del 25 de diciembre -supuesta fecha de nacimiento del Verbo Encarnado- que el niño Jesús se coloca como pieza central del diorama.

Esto deja el nacimiento sin protagonista por poco más de 12 días, tiempo ideal para que otro rey de la casa suplante al hijo de Dios.

Por supuesto, hablamos del gato gandalla que cree que la representación del Belén de hace 2017 años es su cama particular.

Aquí algunos ejemplos de su mala onda.

https://twitter.com/catupini48/status/801550428076851200

Aún así amamos a nuestros gatitos y más cuando refrendan su posición como los verdaderos monarcas de nuestros hogares.

Tal vez si aprendieran a respetar más nuestras tradiciones podríamos quererlos más, pero no obstante sus feas formas, los seguimos adorando.