Décadas antes de que naciéramos, nuestros ancestros se tomaron fotos increíbles cuya genialidad fue difícil de imitar.
Hoy algunos de sus bisnietos, nietos e hijos intentan reproducirlas con cámaras modernas o con tecnología de tiempos lejanos.
Esta colección deja ver cómo algunas personas han intentado demostrar que, en realidad, no somos tan diferentes a nuestros ancestros y que como ellos se ven ahora, nosotros nos veremos en muy poco tiempo.
En esta foto, el pequeño de la izquierda es el abuelo del adulto barbudo de la derecha. La foto fue tomada exactamente en el mismo lugar, solo que con ocho décadas de diferencia.
En la izquierda aparece la abuela de la bella joven de la derecha. Como puedes ver algunos rasgos familiares perduran a través de los años.
De izquierda a derecha: un bombero de los años 60s, su hijo (otro bombero) en los ochenta, y su nieto en la época actual.
Hace algunas décadas, el abuelo del feliz padre que aparece en la foto de la derecha, lo cargó cuando apenas era un bebé. La foto fue tomada exactamente en el mismo parque. Puedes comprobarlo por el juego tubular en el que ambos bebés juegan. Ah, por cierto, el bebé de la derecha sería el bisnieto del señor de la izquierda.
En la imagen superior vemos a tres generaciones de una familia: el abuelo (en el extremo izquierdo), el padre y el bebé, jugando The Legend of Zelda hacia finales de los ochentas. En la imagen inferior vemos cómo ese jovenzuelo que jugaba Nintendo ya es un adulto y el bebé de la primera foto es ya un padre.
Por décadas los padres de esta familia sostuvieron peligrosamente a sus herederos. De arriba hacia abajo: el abuelo, el padre y el hijo, encumbrando con su brazo a sus respectivos retoños.
Una pareja recién casada se toma una increíble foto en una ciudad de Estados Unidos. Podemos ver que tal vez las urbes se vean más llenas en nuestros tiempos, pero que la naturaleza del amor cambia poco.
Este nieto no puede negar que pertenece a la familia de su abuelo. Encuentra las diferencias.
A la izquierda vemos al abuelo del sujeto de la derecha. El nieto lleva su barba porque está de moda, el abuelo, sin embargo, estuvo en un equipo de exploración en suelo ártico durante la década de los cuarenta.
Antes de cumplir 20 años, el joven de la imagen superior estudiaba muy duro en una universidad de Japón. Varias décadas después, su nieto, a punto de cumplir dos décadas de vida, se tomó una foto estudiando duro en la universidad.
Somos igualitos a nuestros ancestros, ¿no lo crees?