24 veces que los disfraces de Santa Claus fallaron miserablemente

Aunque para muchos la época navideña es la más bella del año, lo cierto es que aún en estos tiempos de paz y hermandad la vida se las ingenia para...

Aunque para muchos la época navideña es la más bella del año, lo cierto es que aún en estos tiempos de paz y hermandad la vida se las ingenia para ser horrible.

Como muestra tenemos a Santa Claus, personaje muy querido por los niños de todo el mundo, quienes lo consideran un viejecito bonachón, panzoncito y amigable, cuyo noble trabajo es traernos regalos el 25 de diciembre.

Generalmente el imaginario colectivo respalda esta idea, sin embargo, no son pocos los pobres diablos que por chamba, diversión o altruismo se enfundan en este noble disfraz y echan todo a perder.

Es más,el resultado a veces resulta aterrador.

A continuación, una galería con imágenes bien erizas y poco entrañables de disfraces de Santa Claus, que fallaron miserablemente:

1. ¿Santa sufre violencia doméstica?

2. El tío cosa disfrazado de Santa…

3. En sus tiempos libres Ray Charles también fue Santa:

4. Se parece a mi abuelita (aunque con un poco más de barba).

5. ¿En serio quieren que Santa los visite en Noche Buena?

6. Halloween en Navidad:

7. Santa-Gnomo

8. 

9. Chewbacca navideño

10.

11. Santa Chinelo

12. 

13. Otro Santa golpeado

14. ¿Soy el único que ve al Tigre Toño detrás del disfraz de Santa Claus?

15.

16. ¿No habían matado a Bin Laden?

17. Este Santa se nos anda quedando en el viaje

18. Alushe… ¿eres tú?

19. Dicen que el Diablo es especialista en ocultarse en los lugares menos esperados.

20. Aquí lo peor no es Santa o el payasito enojón, sino el horrible híbrido blanco de a derecha ¿es un puerco, un muñeco de nieve, un perro, el hombre malvavisco o una mezcla de todo eso?

21. Ni en mis peores pesadillas me he topado una imagen así de perturbadora:

22. 

23. Cuando eres Batman…

… y Santa a la vez.

24. ¿Quién te hizo tanto daño Santa?

Y como cereza del pastel, los dejamos con esta bonita canción, en donde las Ardillitas de Lalo Guerrero narran cómo descubrieron a su mamá besando al ‘santo clos’: