Era un día hermoso: las aves trinaron, el día fue azul y los minutos parecieron detenerse para la pareja de enamorados.
Ella del brazo de él, avanzó hacia el altar donde el padre los esperaba, ansioso por unirlos en santo matrimonio ante los ojos del Creador.
La banda sonora era perfecta: una sublime interpretación de la Marcha Nupcial de Félix Mendelssohn que iba sumando tensión al hermoso momento cuando de pronto, una interrupción inesperada.
¡La broma de los gemidos!
La misma en la que has caído una y otra vez cortó de tajo con la atmósfera romántica de la boda, volviéndola el nuevo viral que ha hecho a miles cagarse de risa.
Al parecer el DJ (o el encargado de musicalizar el evento) había reproducido la Marcha Nupcial en su celular antes de ponerse a navegar por su Facebook cuando de pronto le dio play a un video que reemplazó la música nupcial por los gritos escandalosos de la broma.
A los pocos segundos de la reproducción los estridentes gemidos de la actriz porno de la grabación convirtieron las lágrimas de alegría en risas nerviosas y uno que otro gesto de inconformidad.
Así la boda de estos dos tórtolos quedó inmortalizada, no por el pastel, el amor eterno, el buffet continental o las puntadas del embrutecido Tío Juan, sino por el error de un DJ que no supo distinguir entre un momento romántico y los sonidos lascivos de una mujer en pleno coito.
Tal vez la próxima vez los novios (o el padrino) deberían considerar contratar a un DJ más profesional que tenga listo su tracklist nupcial libre de gestos sexuales.
Pero hablando en serio, la broma de los gemidos no es divertida. Es un mal que ya ha reclamado las vidas (sociales) de miles en todo el mundo y el fenómeno parece estar lejos de detenerse.
Si amas a la humanidad te pedimos que te detengas.