Estamos que no la creemos… ya sabes. Desde que la homosexualidad es una enfermedad y toda enfermedad tiene cura, ahora resulta que Mauricio Clark quiso retractarse de la sodomía y ya no le hace a eso… ¡sí tú!
Resulta que tras varios pases de aquellos, mucho bb y luego mucho arrepentimiento, el presentador de televisión regresó a la vida pública con un mensaje contundente: ser gay es cosa del pasado, la moda ahora es, enamorar rezando.
¿Recuerdas a Mauricio Clark, no?
Bueno, como bien sabes hace ya un tiempo, Mau dejó la tele para internarse y dejar su adicción a la cocaína, cosa que está muy bien porque drug’s not a cool thing.
La cosa es que ser gay tampoco es chido… Así que Mau compartió el notición con un tweet.
Después, supimos en una entrevista exclusiva con TVNotas que Mau se confesó como gorda en tobogán y con mucho harto detalle. Así lo dijo:
“Si me preguntas acerca de mi homosexualidad, te puedo decir que hoy la homosexualidad es parte de mi pasado, hoy retomo una vida como me hizo Dios naturalmente (…) mi sueño es ese: formar una familia, educar y sobretodo darle la oportunidad a los niños de lo que Dios me ha podido dar”.
Y bueno, Mau también dice que está arrepentido en una suerte de factor religión-culpa que lo llevó a retomar el camino de la bondad y de las normas tradicionales.
Así lo dijo:
“Lo más difícil que he hecho en mi vida y de lo que me siento muy orgulloso es haberme arrepentido ante Dios, haberme perdonado por todas las aberraciones que cometí”.
Así que ARREPIÉNTANSE… están a tiempo.
La cosa es ¿qué habrá pasado con Mau en su proceso de rehabilitación? No lo sabemos. Ahora bien, que sí deberíamos estar conscientes de una cosa:
¿Es válido arrepentirse de la homosexualidad? Sí.
¿La homosexualidad tiene cura? No. Desde que no se le considera una enfermedad pues no te curas de nada ¿o sí?
En el Insta de Mau hay imágenes como esta…
Ahora bien… la forma en que Mau se curó supone un proceso terapéutico ¿no? Un mismo proceso que nuestros amigos de la ONU consideran como una tortura, es decir, que las terapias para curarse de la homosexualidad porque la consideran como algo aberrante no están padres. Aquí pueden saber más al respecto de ello.
Lo cierto es que nosotros no queremos dejar de ser amigos de Mau, y esperamos que él tampoco de nosotros, pero sí no es padre que alguien asuma la homosexualidad como una aberración.
Amiga, date cuenta…
A nosotros sí nos gusta la cerveza fría, la tele fuerte y los homosexuales ¡locas, locas! ¡Sí!
