Hemos visto muchos manuales de supervivencia de qué hacer si se desata un apocalipsis zombie, pero qué hay de una bomba nuclear.
Después de la Guerra Fría, el mundo se olvidó del pequeño y latente peligro que representa una bomba nuclear, pero con las crecientes tensiones entre Trump y, bueno, todo el mundo, no está mal repasar qué podemos hacer… si es que acaso se puede hacer algo.
Cayó o no cayó la bomba… ¿cómo saber?
Si de pronto vez una luz blanca y muy brillante y te deja súper encandilado, una de tres, te está dando el sol, te soltaron un flashazo, o explotó una bomba nuclear cerca de donde estás.
En caso de tratarse de la tercera opción, es probable que la bomba haya explotado a 80 km de donde estás.
Si estás a menos de 16 km, te darás cuenta de lo que pasó por las quemaduras de primer a tercer grado que sufrirá tu piel.
Claro, la mas obvia es el hongo que se forma después de la detonación. Ese lo ubicamos porque hemos visto miles de imágenes de la explosión en Hiroshima.
¿Qué hacer?
El investigador Michael Dillon tiene los siguientes tips:
Ya que te diste cuenta que sigues vivo, lo primero (y más obvio) es buscar refugio para evitar la lluvia radioactiva. Esta lluvia consiste en partículas que caen desde la atmósfera y que provienen de la explosión.
De preferencia, vete a tu refugio antinomias. Si no cuentas con uno #porquepobre y no estás en estado de shock en un rincón, trata de ubicar algún edificio hecho de ladrillo o cemento sin ventanas y con paredes gruesas gruesas. El sótano es la mejor opción, léase, el estacionamiento.
En este gráfico puedes ver cuáles son los mejores lugares de un edificio para esconderte.
Las estructuras de madera valen pa’pura madre. También las casas o edificios de un piso. Necesitas algo grande, sólido, grueso… (*suspiro, ¿que no todos?)
Si tienes una casita de un piso al lado y un edificio de varios pisos a un par de cuadras, mejor corre al edificio. No lo hagas si vas a durar más de 15 minutos expuesto a la radiación. Quédate ahí una hora antes de buscar otro refugio.
Mantente alejado de puertas y ventanas. Báñate o limpia con algo húmedo las partes que quedaron expuestas a la radiación. Usa shampoo y jabón. No te talles muy fuerte.
Suénate la nariz, límpiate los párpados, pestañas, cejas y orejas. Date el baño más obsesivo que te has dado en la vida.
Quítate toda la ropa y métela en una bolsa. Avienta la bolsa lejos lejos y no la vuelvas a tocar. No seas manchado y no se la avientes a otras personas.
Bebe únicamente agua en botella. Come pura comida que venga de paquetes sellados.
Espera a que alguien te encuentre. Prende tu radio. ¡No! No le pongas a la KeBuena, pon las noticias y espera hasta tener noticias de dónde hay ayuda o refugios.
Si todo sale man, sigue a las ratas y a las cucarachas, ellas te enseñaran el camino a la salvación.
Vía: Gizmodo
