Ser mamá es uno de los sueños más grandes que muchas mujeres tienen o por lo menos eso era hasta hace unos 10 años, y es que ahora con la maternidad millennial se convirtió en una de las decisiones más importantes para tomar a conciencia y darle vida a un ser.
Aunque mucha gente piensa que ser mamá solo implica traer a alguien a la vida y hacer “lo que se pueda, como se pueda” para educarlo y mantenerlo, es una decisión que va más allá de eso, que necesita pensarse en el aspecto psicológico, económico y sentimental.
Darle vida a una persona debe ser algo hermoso y yo que no soy mamá debo confesar que tengo esa inquietud de saber qué se siente, pero afortunadamente hoy en día tengo la libertad de elegir entre ser mamá y no serlo pues, contrario a lo que muchas mujeres tuvieron que vivir en el siglo pasado, hoy es diferente.
Ser mamá o no serlo
Basta con ver la felicidad que las mujeres que han podido concebir irradian para enamorarse del concepto de ser madre, sin embargo, ya no es suficiente, y aunque mi mamá, mi abuela, mis tías y mujeres que tengo alrededor me presionen, es importante reflexionar sobre la responsabilidad que existe en esto.
Con responsabilidad me refiero a ser estable en todos los sentidos de tu vida, lo cual es algo que debemos buscar para tomar esta decisión pues tener bebés no es como “hacer enchiladas” como muchos creen y una vez que somos estables, entonces seguramente traer al mundo a alguien será una de las mejores decisiones que habrás tomado en tu vida.
Yo quiero ser mamá, quiero que mis hijos crezcan bien, que no les falte nada y que sean felices, algo que seguramente todas deseamos, por eso, en lo que eso sucede, hay razones que en realidad me hacen pensarlo mejor porque no hay prisa.
¿Por qué no quiero tener bebés?
Para empezar, quiero preguntarme: ¿Estoy mentalmente preparada para tener un bebé? ¿Tengo la madurez suficiente para concebir y además saber qué cuidados necesita? Y yo sé que nadie está preparada para ser mamá, pero es justo eso: En realidad, sí deberíamos estar preparadas para ser mamás.
No basta con un: “Es que me gustan los niños” o “los que Diosito me mande” y pensar que es así de fácil. Un hijo es para toda la vida, dependerá de la educación que le des, y si no estamos preparadas psicológicamente lo único que haremos será hacerle daño.
En segundo plano viene la economía, que por ahí escuché algo muy cierto, “ya no es rentable tener hijos” y aunque suene un tanto egoísta y hasta tal vez grosero, es verdad, pues, a poco no te preguntas “¿cómo es que puedes traer al mundo a alguien que dependerá de ti para toda la vida?”, si apenas nos alcanza para pagar una renta y a veces ni siquiera eso.
A lo que mi mamá respondió que “nunca ha sido rentable” y tal vez tendría razón si aún viviéramos en una época en la que todo fuera más económico, en la que los sueldos quizá eran igual de pobres a ahora, pero no había inflación. Así que aquí es donde no pude evitar preguntarme, ¿en verdad podré mantener a un hijo?
¿Es malo no ser mamá?
Por otro lado, también hay quienes de plano se casan con la idea de no ser mamás y se sienten plenas y estables en sus vidas, su decisión es completamente respetable pues tienen ideas distintas, sueños que prefieren vivir solas, con sus parejas y otros caminos que deben respetarse sí o sí.
Así como se respeta la maternidad de quienes lo desean con todo su corazón y es un sueño, debe hacerse con quienes deciden no tener hijos, pues no es una obligación como mujer para la autorealización, hay muchas cosas más con las que podemos sentirnos plenas y no tiene por qué ser un bebé.
Muchas personas catalogan de egoístas a quienes no quieren tener bebés, sin embargo, todo tiene que ver con los ideales de cada persona y de cada pareja, pues hay quienes eligen no ser papás y todo porque tienen metas en común donde esto no cabe o simplemente no es para ellos. Porque sí, hay quienes no tienen la vocación para lidiar con niños y está bien.
“Me operé antes de los 30 para no tener hijos”
Hoy en día vemos el ejemplo de muchas parejas que muy jóvenes incluso antes de los 30 años se operan para no tener hijos y ¿qué es lo que reciben? Por supuesto críticas, en las que muchas se resumen a decepción por parte de su familia, insultos y discusiones.
Sin embargo, lo único que están haciendo es tener conciencia de lo que hacen, pues el mundo tampoco está para tener bendiciones como si fueran tortillas. ¿Qué les vamos a dejar? Si nosotros estamos padeciendo, ¿qué será de ellos?
No tiene nada de malo ser mamá o no serlo, simplemente se trata de una gran responsabilidad y hacer una elección a conciencia, nos dejaría un mundo mejor.
Eso sí, el amor de una madre hacia sus hijos debe ser siempre inmenso, puro, inexplicable e incluso el más grande amor en la vida de una mujer, simplemente por eso la felicidad de una mamá al traer a alguien a este mundo es interminable.
Pero definitivamente es una decisión importante que hay que tomar y pensar porque afortunadamente tenemos ese derecho y cada quien puede hacer su familia como quiera. Así como las que sí quieren ser mamás.
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