Hoy se cumplen 32 años del sismo de 8.1 grados que destruyó la Ciudad de México durante dos largos minutos.
Así que decidimos hacer un viaje en el tiempo, cuando Internet no existía y los fotoperiodistas eran los encargados de retratar la realidad, por más cruda que fuera.
Uno de los fotógrafos que se aventuró a recorrer la ciudad en ruinas fue Pedro Meyer, quien logró retratar a mujeres y hombres organizándose para salvar a sus seres queridos, construir refugios, repartir medicinas, cobijas y comida.
Pero además capturó nuestro característico sentido del humor, que en medio de la catástrofe nos ayudó a sobrellevar el dolor.
Sus fotos son una mezcla entre lo derruido, lo muerto pero también la lucha, la esperanza y la solidaridad mexicana que tanto nos hace falta.
Vía: Pedro Meyer
