Cass Clemmer es un activista y educador trans, cuyo trabajo se centra en tumbar los tabúes entorno a la menstruación. Para ello, creó a Toni el Tampón, el protagonista de una cuenta de Instagram humorística. Junto a sus amigos, otros productos de higiene menstrual, Toni enseña el lado más ligero e inclusivo de la menstruación, independientemente de la edad y del género.
Sin embargo, recientemente Clemmer rompió con las lúdicas aventuras de Toni el Tampón y sus amigos, para compartir su mensaje de manera más contundente y personal: algunos hombres trans, como él, también menstrúan.
La imagen de Cass, sentado en una banca a plena luz del día sosteniendo un cartel con las palabras “los periodos no son solo para mujeres #SangrandoSiendoTrans” y con una mancha de presunta sangre menstrual en el tiro de su pantalón fue compartida tanto en Facebook, como en Instagram.
Junto a la imagen, Cass escribió un crudo poema sobre su experiencia menstruando. Aunque el texto es revelador, las reacciones a la imagen lo son aún más.
Las respuestas a la publicación han sido mayoritariamente negativas. Pero la crítica que ha recibido Cass solo pone en evidencia las fibras sensibles (tabúes, estigmas y prejuicios) que tocó y solo justifican más la necesidad de poner estos temas (lo trans, la menstruación, el sexo y el género) sobre la mesa.
“Tu sangre es sucia…”
Muchos trolles están atacando a Cass por permitir que su pantalón se manchara, acusándolo de ser una persona asquerosa y peligrosa para aquellos que se sientan en bancas públicas. ¿Cuál es el mensaje detrás de esto? ¿Que la menstruación es peligrosa? ¿Que las personas que la tienen están haciendo algo absolutamente asqueroso y condenable?
Otros critican que la foto haya sido tomada en un lugar público. “Tengan todo los periodos que tengan, pero háganlo en privado”. ¿Por qué nos ofende y altera tanto un poco de sangre? ¿Porque reaccionamos con más violencia contra un “tengo mi periodo” que contra un “voy a mear”? ¿Por qué tenemos que invisibilizar tanto la menstruación? ¿Por qué satanizar tanto un proceso fisiológico?
Sexo vs Género
Naturalmente, la separación conceptual entre género y sexo también ha sido fuertemente comentada, alegando que Cass no es un hombre, es una mujer porque así nació, y por lo tanto los hombres no menstrúan.
Las personas que creen que género y sexo es lo mismo básicamente se escudan con el argumento de un dios que lo diseñó todo sin error o de un esencialismo biológico (o una mezcla de los dos). Porque claro, es mil veces más fácil creer que “pene” y una “vagina” son los nombres de valores intrínsecos e inmutables de un Universo de por lo menos 200 mil millones de galaxias, que creerle a otro ser humano cuando habla de sus sentimientos y su identidad. Es más, aunque no importen los sentimientos ajenos, la idea de lo “masculino” y lo “femenino” histórica y regionalmente ha fluctuado y cambiado. Es decir, el “ser hombre” o “ser mujer” no es un absoluto (ni es inamovible).
El tema de lo trans (o la intersexualidad o cualquier haz en el espectro de la identidad sexual humana) no es un tema biológico ni religioso, es un tema ético y consecuentemente político. No se trata sobre si los angelitos hacen o deshacen o si el cuerpo sangra o no, o si nacimos desnudos y pelones y así nos tenemos que quedar hasta la muerte; se trata de seres humanos, personas cuyas vidas y cuerpos son sometidos bajo políticas que pretenden privarlos de su dignidad.
Hay niños y adultos que están sufriendo en silencio por el medio a romper los tabúes de nuestra sociedad. Independientemente de nuestras creencias u opiniones. Lo más humano sería prestar un oído e intentar entender de dónde viene ese dolor y cómo podríamos evitarlo. Ok… quizá vivamos en un valle de lágrimas, pero no debemos resignarnos al sufrimiento innecesario.
Ulteriormente, si no te sientes identificado con esta imagen y este mensaje, recuerda: no se trata de ti.