Paleontólogos descubrieron una nueva especie de dicinodonte, el Bulbasaurus phyloxyron (y no, no es ni un pokémon ni un dinosaurio). El fósil fue encontrado en el Cuenco de Karoo, en Sudáfrica.
Es difícil clasificar a los dicinodontes, pues actualmente no hay nada que se les parezca. Fueron reptiles mamiferoides (o sea, parecidos a mamíferos) que están más relacionados con nosotros los humanos que con cualquier velociraptor. La mejor forma que tienen los científicos de describir al Bulbasaurus es como un cerdo tortuga con colmillos; cuerpo de cerdo -sin ofensa- y pico de tortuga.
De hecho, el nombre de Bulbasaurus (lagarto de bulbo) se refiere a su hocico/pico de forma “búlbica”, y no al curioso y “azaroso” y absolutamente no relacionado parecido con su tocayo japonés:
Los dicinodontes -dos dientes de perro, literalmente- fueron los herbívoros más exitosos de su época (porque hace 260 millones de años nadie mascaba y comía hojas como ellos, ¡eran tremendos!), la mayoría eran del tamaño de una oveja moderna y aunque su estructura ósea es más parecida a la de un reptil (como sus patas delanteras que salen de los lados del cuerpo), poseían características propias de un mamífero (como sus patas traseras, que salían por abajo del cuerpo).
Si quieres leer TOOOODO sobre este descubrimiento (y ver muchas, muchas fotos del cráneo de 16 cms), en PeerJ podrás leer el estudio completo.
