En enero de 2017, el destino de las fichas de hacer negocios en México Monopoly quedó en las manos de la Internet. Hasbro, la compañía de juguetes y juegos que manufactura el clásico juego de mesa, abrió una convocatoria masiva para que la máquina del odio los cibernautas eligieran las 8 nuevas piezas del juego.
Nadie, ni el perrito, estaba a salvo. Si las piezas actuales no quedaban entre las 8 más populares, serían desechadas de las ediciones futuras del juego (y de nuestros corazones). Aunque aún tendremos que esperar hasta el 19 de marzo, el día Mundial de Monopoly, para saber quienes son los ganadores definitivos, Hasbro ya anunció que el dedal no regresará. Nunca. Jamás. Adiós, para siempre adiós.
Tiempos modernos
Esta pérdida no es de extrañarse. Hay que considerar que entre los 64 candidatos se encuentra un pingüino, un auto monstruo y hasta un tiranosaurio rex. Por amor a todo lo pateatraseros, ¿qué haría un dedal contra un T-rex?
No es la primera vez que las fichas de Monopoly cambian. La última vez que sucedió fue en 2013, cuando el gato reemplazo a la plancha. Sin embargo, es muy significativa la despedida del dedal, pues era una de las piezas originales del juego. Del set original de la década de los 30 ya sólo queda el zapato, el sombrero de copa y el carro.
¿Quién será la siguiente en recibir el hachazo?
