Armando Manzanero y Susana Zabaleta hicieron provocativas fotos; las ventilan en redes

Ni en las telenovelas se atrevieron a tanto.
Armando Manzanero y Susana Zabaleta en sesión de fotos

Mientras todo el mundo le llora a Armando Manzanero por su partida a los 85 años de edad, en redes sociales se habla más de una sesión de fotos que protagonizó el compositor con su querida Susana Zabaleta, que deja entrever que quizás su relación era de más que simples amigos.

Si uno ve las imágenes se va para atrás dado el alto contenido de sensualidad que derrocharon los artistas en aquella ocasión. Lo impresionante es ver al fallecido cantautor en una faceta que nunca le conocimos y que hasta ahora que ya no se encuentra con nosotros salió a la luz.

Las fotos que Armando y Susana no quieren que veas

Ahora sí, a lo que venimos. Todas las instantáneas que circulan en redes sociales poseen un alto nivel provocativo que ya lo quisiéramos en casa. En la primera vemos a Susana Zabaleta totalmente metida en su papel de sometida, mientras que el buen Armando Manzanero parece que está por tocar la campana de la iglesia para ir a misa.

Fuente: CUMWAVE (twitter)

En la segunda, el intérprete de “Cuando estoy contigo” tomar un rol de padrote que hasta nos hace creer que si se hubiera dedicado a la actuación yo sí le andada dando… un premio, claro.

Fuente: CUMWAVE (twitter)

En la tercera foto la cosa sube de nivel porque al parecer la temperatura de las celebridades se fue hasta las nubes.

Fuente: CUMWAVE (twitter)

En la última de las fotos, Armando Manzanero y Susana Zabaleta cierran con broche de oro con un beso que ojalá y en su momento la esposa del cantante la haya visto, porque sino es capaz de cualquier cosa con tal reclamarle.

Fuente: CUMWAVE (twitter)

Hasta el momento no se sabe quién es el creador de las imágenes, pero vaya que causaron furor en redes sociales. Unos las tomaron como lo que son, simples fotografías, pero otros pegaron el grito en el cielo como si se tratara de lo peor del mundo.

Al final, lo importante es que el buen Armando se ve que vivió muy bien, pese a que no pudo despedirse de su familia como hubiese querido.