Todos tenemos esos momentos en los que la razón y la lógica se suspenden temporalmente y se produce una pausa cerebral. Si tienes suerte, estás solo y las únicas consecuencias negativas son el ego ligeramente golpeado que se da cuenta de que no eres tan listo como creías que eras.
Sin embargo, estas personas no tuvieron tanta suerte. No solo hubo testigos de sus contratiempos mentales, sino que también había celulares disponibles para capturarlos para que todos pudiéramos disfrutarlos.
En Erizos hicimos una lista de los momentos más divertidos y que nos hacen preguntarnos, ¿en qué demonios estaban pensando?
Velo con tú mismo y dinos que piensas.
El rompe la regla no es nada inteligente
