Esta es la increíble y conmovedora historia de Pesesín, el pez que sobrevivió

Fe en la humanidad restaurada.

A principios del mes de julio, los vecinos de un edificio departamental en la zona de Vallacas, en Madrid, España, se toparon con una guapísima sorpresa: un acuario improvisado, unos botecillos con comida para peces, una nota y a Pesesín, el pez.

 

Para empezar, el hecho de que un pez se llame Pesesín es absolutamente hermoso. En segundo lugar, la nota era una petición anónima a los vecinos del edificio para cuidar y alimentar a Pesesín mientras que el dueño misterioso se ausentaba unos días. El mensaje incluía un calendario para que los vecinos pudieran marcar que Pesesín ya había comido (la nota aclaraba que solo debía ser alimentado una vez al día).

 

A continuación pasaron dos cosas preciosas:

En vez de abandonar al valiente pescadito a su suerte y condenarlo a una muerte rodeada de apatía social y negligencia, los vecinos se encargaron de él. Y en segundo lugar, la historia se viralizó en Twitter gracias a que una de esas vecinas la compartió.

https://twitter.com/Nuria_GMz/status/884816084435697664

 

Es más, tan bien lo cuidaron, que en cuanto su comidita de pescadito bonito se terminó, los vecinos del número 4 le fueron a comprar más. Claro, después se enteraron que de hecho se acabaron en una semana la comida de un mes. Pero bueno, la intención es lo que cuenta y Pesesín fue rodeado de bendiciones y buenas vibras mientras estuvo bajo el cuidado vecinal.

 

Tanto enterneció la historia a España y tanto alcance tuvo, que hasta la Policía Nacional española no dejó pasar la oportunidad y nos recordó lo que está bien: mandarle besines a Pesesín.

 

Eventualmente, el dueño anónimo regresó de su viaje y se reveló que era una dueña, que estaba muy agradecida y que efectivamente Pesesín se la pasó bomba.

 

Enhorabuena por sobrevivir, Pesesín, tú eres el pecesito de nuestros ojos.

 

 

 

Vía Antena 3