Una serpiente adicta a la metanfetaminas tuvo que ser internada en rehabilitación para poder recuperarse.
La pitón que prefirió quedar en el anonimato acaba de salir victoriosa después de someterse a siente largos y difíciles meses de rehabilitación. Sé lo que están pensando “¿una serpiente adicta a las metanfetaminas? ¿cómo? ¿dónde?.”
Evidentemente esto solo pudo haber pasado en un país: Australia. La tierra del canguro no está conforme con poseer a varias de las criaturas más mortíferas del planeta. Ahora las está convirtiendo en adictas. Poco tiempo falta para que asalten a los transeúntes para poder costear sus drogas.
La eriza serpiente se volvió adicta a la sustancia después de estar varios meses expuesta a humo y partículas de esta sustancia. Aún así, ella fue quien escogió un laboratorio de metanfetaminas como hogar.
Cuando detectaron a la polizón, la enviaron a los Servicios Correctivos a un Centro de Cuidados para Vida Salvaje. El manager del lugar, Ian Mitchell, describió su comportamiento como “totalmente al límite, nerviosa, resbaladiza y lista para atacar.”
Las pitones normales se comportan con decencia. Son “constrictoras pero no venenosas y simplemente están echadas.” Sin embargo nuestra amiga, como buena adicta, estaba “muy agresiva y con un comportamiento muy errático.
Fue dada de alta y actualmente se encuentra relajándose en un retiro para serpientes donde está conociendo el mundo lejos de las drogas.
Vía: Daily Mail