Uno de los recuerdos que más generaciones tienen es el del icónico Mago Enmascarado que era capaz de desaparecer carros y personas en plena televisión, sin embargo, un día desapareció, pero ¿realmente murió o solo “lo hizo de nuevo“?
Val Valentino, el nombre real del Mago Enmascarado, se convirtió en una de las figuras más importantes del entretenimiento al cautivar con el misterio detrás de su máscara, que mantuvo oculta su identidad desde 1996 hasta 2009, cuando se transmitió por última vez cuando en 2009 Grandes secretos de la magia finalmente revelados.
La verdadera razón por la que el Mago Enmascarado desapareció
Aunque su repentina desaparición indicaba que “el mago lo hizo de nuevo”, algo terrible estaba pasando en su vida, pues Val Valentino dio a conocer en 2014 que tras varios años había sufrido síntomas que lo tenían muy debilitado, pero nadie sabía qué tenía.
“Durante tres años fui de un médico tras otro, no pudieron averiguar qué estaba mal”, informó El Mago Enmascarado.
Sin embargo, lo peor estaba por venir, porque en 2017 lo diagnosticaron con cáncer de próstata, lo cual lo dejó fuera por al menos 5 años, porque los dolores que tenía sencillamente le impedían trabajar.
¿El Mago Enmascarado murió?
Los trucos de magia del ilusionista crearon una gran expectativa sobre su trabajo en televisión y miles de niños, jóvenes y adultos, se volvieron fans de ver cómo cada semana era capaz de escapar de cadenas o de hacer desaparecer personas.
Por lo que la noticia sobre su cáncer impactó aún más porque mucha gente pensó que murió, esto porque se dio a conocer que El Mago Enmascarado perdió toda su fortuna en los tratamientos contra el cáncer.
Sin embargo, sus fans no lo dejaron solo y organizaron una colecta para poder ayudarle a pagar su tratamiento contra el cáncer y pese a todos los pronósticos negativos de los médicos, el Mago Enmascarado se recuperó inesperadamente.
De un día para otro, Val Valentino recuperó su vida por completo y logró vencer el cáncer de próstata. A 3 años de esto, el Mago Enmascarado recuperó su papel como uno de los ilusionistas más icónicos del mundo y con 64 años de edad “lo hizo de nuevo”.
